Tras el éxito comercial de la cinta “Dr. No”
(1962), los ejecutivos de los Estudios United Artists le dieron luz verde a la
realización de una segunda película de James Bond. La novela de Ian Fleming en
la cual se basaría esta secuela sería seleccionada teniendo en consideración
una entrevista otorgada por el Presidente John F. Kennedy a la revista Life en
1961, donde nombraba al quinto libro en la saga de Bond, “From Russia With
Love”, como uno de sus diez libros favoritos. La popularidad alcanzada por la novela
tras los dichos de Kennedy y el éxito obtenido por “Dr. No”, permitió que los
productores Harry Saltzman y Albert Broccoli dispusieran de un presupuesto de
dos millones de dólares para llevar a cabo su nuevo proyecto, que contaría con
gran parte del equipo técnico que trabajó en el film anterior y por supuesto
con Sean Connery, quien pidió una generosa compensación monetaria por su
contribución a la formación de la mística de Bond. El resto del elenco estaría
conformado por la italiana Daniela Bianchi, quien había sido finalista del concurso Miss Universo en 1960 y que supuestamente fue seleccionada por el mismo Connery para
interpretar al interés amoroso del espía; Pedro Armendáriz, quien era un colaborador habitual del director
John Ford y que en ese entonces estaba luchando contra un cáncer terminal, lo
que obligó a cambiar el plan de rodaje para acomodarse a su estado de salud; Lotte Lenya, una actriz y cantante austriaca
que debido a sus rasgos masculinos era perfecta para interpretar a una sádica
oficial soviética con tendencias lésbicas; y Robert Shaw, quien pese a ser más
conocido como dramaturgo que como actor, fue escogido debido a su físico
imponente para interpretar a un asesino cuyo objetivo es interferir en la
misión de Bond. Cabe mencionar que con el fin de interpretar de mejor manera su
papel, Shaw practicó durante meses culturismo y lucha greco-turca, y además
pasaba horas ensayando las escenas de lucha junto a Connery en un gimnasio de
Estambul.
Debido a que la novela de Fleming era un thriller ambientado en la
Guerra Fría, con el fin de evitar cualquier alusión política que pudiera
resultar controversial, los productores reemplazaron a la agencia secreta
soviética SMERSH con el sindicato criminal SPECTRE. Si bien el guionista
original era Len Deighton, quien incluso acompañó a Harry Saltzman, Terence
Young, y al director de arte Syd Cain a Estambul para buscar locaciones,
terminó siendo reemplazado por el escaso progreso de su trabajo por Johanna
Harwood y Richard Maibaum, quienes habían participado en el guion de “Dr. No”. Harwood,
quien finalmente no sería acreditada como coautora del guion, explicaría
durante una entrevista concedida a la publicación Cinema Retro que el guion de
“From Russia With Love” que ella había escrito seguía demasiado de cerca la
novela de Fleming, lo que no le gustó a Terence Young quien insistía en agregar algunas ideas que no estaban presentes
en la obra original del escritor, lo que provocó que eventualmente Harwood
abandonara el proyecto. Maibaum por su parte, fue alterando el guion a medida
que el proceso de producción del film progresaba. Por ejemplo, Donald “Red”
Grant fue incluido en las escenas de Estambul poco antes de que el equipo de
filmación viajara a Turquía. Esto provocó que la subtrama que involucraba a los
operativos de SPECTRE tomara mayor importancia, así como también los intentos
de Grant por proteger a Bond hasta que el británico cumpliese su objetivo. Ya en
el último cuarto de la película, Maibaum agregó dos escenas de persecución que
incluían la presencia de un helicóptero y varios botes a motor, y cambio la
locación del enfrentamiento entre Bond y Klebb de París a Venecia.
En “From Russia With Love” (1963),
con el fin de
vengarse del espía británico James Bond (Sean Connery) por asesinar al agente
conocido como Dr. No y destruir sus activos en el Caribe, la organización
criminal SPECTRE comienza a entrenar agentes para asesinar a 007, destacándose
el asesino irlandés Donald “Red” Grant (Robert Shaw). De forma paralela, uno de
sus miembros llamado Kronsteen (Vladek Sheybal), elabora un complejo plan que
tiene por objetivo enemistar a Inglaterra con la Unión Soviética para poder
apoderarse de un decodificador Lektor que está en manos de los soviéticos. Para
lograrlo, la Coronel Rosa Klebb (Lotte Lenya), ex jefa de operaciones de la
inteligencia soviética (SMERSH) y actual agente de SPECTRE, recluta en base a
engaños a la hermosa soldado soviética Tatiana Romanova (Daniela Bianchi) para
que atraiga a Bond a Estambul con la excusa que desea desertar y escapar con él de Turquía,
y de paso ayudarlo a conseguir el preciado decodificador, el cual también es
buscado por la inteligencia británica. Aun cuando Bond sospecha que todo puede
tratarse de una trampa, la oferta es demasiado tentadora como para dejarla de
lado, por lo que emprende una misión que probará ser mucho más riesgosa que la
anterior, ya que será seguido de cerca por el implacable Grant quien no parará
hasta asesinarlo y arrebatarle el codificador.
“From Russia With
Love” tiene una especial importancia ya que marcaría algunas de las pautas que
serían seguidas por el resto de las entradas de la saga de películas de Bond.
Por ejemplo, es el primer film donde aparece el Mayor Boothroyd (Desmond
Llewelyn) más conocido como el agente Q, quien es presentando como el encargado
del departamento ficticio de investigación y desarrollo del MI6. Junto a él
también comienza la tendencia relacionada a la inclusión de artefactos
especialmente diseñados para ayudar a 007 en determinados momentos de las
misiones que emprende. Además de esto, esta cinta inauguraría la tradición del
incluir escenas introductorias, que pueden o no tener relación con el resto de
la trama, las cuales por lo general están enmarcadas dentro del género de la
acción. En este caso, la secuencia en la que Grant acecha al falso Bond en el
jardín con forma de laberinto como parte de su entrenamiento, originalmente
estaba ubicada luego de los créditos iniciales, pero el editor Peter Hunt junto
a Terence Young terminarían ubicándola al inicio del film, sentando un
precedente que se transformaría en uno de los elementos icónicos de la saga.
“From Russia With Love” también establecería que al interior de SPECTRE existe
una organización jerárquica denominada por números, donde Ernst Stavro Blofeld
(cuyo rostro no se ve) es el Número 1, Rosa Klebb la Número 3 y Kronsteen el
Número 5. Por último, esta película sería la primera en utilizar a un cantante
de moda para interpretar una canción escrita exclusivamente para la producción,
la cual sería presentada mediante una vistosa secuencia de créditos diseñada
por Robert Brownjohn que sentaría las bases estilísticas de este tipo de
secuencias para el resto de la saga.
Pese a presentar
una de las tramas más complejas de la serie, la cual además está repleta de
giros dramáticos relativamente sorpresivos y un buen número de personajes
secundarios que participan en diversos momentos de la historia, “From Russia
With Love” es una cinta fácil de seguir. A diferencia de lo que sucedería en
gran parte de las películas subsecuentes de Bond, donde se privilegiaría el
estilo por sobre la sustancia, lo que en ocasiones funcionaría de maravilla, en
esta oportunidad la historia ocupa un rol central en un film que al igual que
su antecesor, está diseñado con el fin de plasmar determinadas fantasías
masculinas. Bond básicamente cae en la trampa de SPECTRE porque piensa con su
entrepierna es vez de con su cerebro, lo cual a fin de cuentas no importa
demasiado porque cada vez que se encuentra en problemas es capaz de salir
airoso principalmente gracias al uso de fuerza bruta, perpetuando la imagen de
macho alfa que exhibe durante toda la saga y que lo convirtió en un ícono
cinematográfico masculino. Dentro de las escenas de acción que presenta la
película, evidentemente se destaca el ataque ejecutado por un grupo de asesinos
a sueldo a un campamento gitano, el enfrentamiento entre Bond y Grant a bordo
del Expreso Oriente, el cual resulta excitante gracias a que está sumamente
bien coreografiado y que acontece en un espacio reducido, y parte de las
secuencias finales donde Bond y Romanova intentan escapar de un grupo de agentes
de SPECTRE a bordo de numerosos botes a motor y de un helicóptero, una de las
cuales presenta algunos paralelos con la famosa escena protagonizada por Cary
Grant en el film de Alfred Hitchcock “North by Northwest” (1959).
“From Russia With
Love” posiblemente tiene a uno de los elencos mejor ensamblados de toda la
saga. Mientras que Robert Shaw y Lotte Lenya le dan vida de forma perfecta a
dos de los villanos más memorables del universo Bond, Pedro Armendáriz, quien
interpreta al enlace en Turquía de 007, Kerim Bay, le da vida a uno de aliados
más carismáticos de Bond, con quien no solo exhibe una gran química sino que
además es uno de los pocos personajes cuyo destino provoca un impacto emocional
en el espía. Lamentablemente, Armendáriz se suicidaría un mes después de
terminado el rodaje, tal y como lo hiciera previamente su amigo Ernest Hemingway.
Daniela Bianchi por su parte, si bien carece de la sexualidad cruda exhibida
por Ursula Andress en “Dr. No”, se presenta como un personaje lo
suficientemente provocativo, inocente, y vulnerable como para que el espectador
empatice con ella. Cabe mencionar que debido a las dificultades de Bianchi para
hablar inglés, su voz tuvo que ser doblada por la actriz británica Barbara
Jefford. Por último, Connery en esta oportunidad resulta más convincente como
un agente secreto culto, educado y sofisticado, que sabe comportarse como un
tipo rudo cuando es necesario. Evidentemente sigue siendo un personaje sexista
que cuando no le está pegando en el trasero a Bianchi, está interviniendo en
una pelea entre dos muchachas gitanas con quienes eventualmente se acuesta. El
sexo es clave dentro del subtexto del film, quizás por ese mismo motivo se
presenta a Bond, un representante cabal de la heterosexualidad, como el
encargado de detener a crueles lesbianas y psicópatas asexuados. Ten una vida
sexual saludable y no tendrás el deseo de destruir el mundo, pareciera decir
Fleming y Young en lo que obviamente resulta ser un discurso controversial y
errado, pero bastante representativo de la mentalidad reinante en la década del
sesenta.
Contrario a lo que se podría pensar viendo el
producto final, el film tendría una serie de dificultades técnicas y
presupuestarias. Entre otras cosas, el productor Albert Broccoli provocó un
retraso de siete días cuando decidió que el viento estaba soplando en la
dirección contraria a la requerida para el rodaje de la secuencia de
persecución que involucraba a los botes a motor. Terence Young y el asistente
de dirección Michael White por su parte, sufrieron un accidente que pudo
costarles la vida cuando el helicóptero en el que se encontraban viajando para observar
una locación fue derribado por una súbita corriente de viento. Por último, con
el fin de capitalizar lo antes posible la popularidad obtenida por “Dr. No”, el
proceso de post producción fue apresurado para que la película pudiese ser
estrenada solo dos meses después de terminado el rodaje. Esto se tradujo en una
serie de problemas de continuidad y de montaje, los cuales en su gran mayoría fueron
solucionados por Terence Young y el editor Peter Hunt. “From Russia With Love” terminaría
siendo todo un éxito tanto a nivel local como internacional, situándose hasta
el día de hoy como una de las mejores películas del agente 007 y en la
favorita del mismísimo Sean Connery.
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